¿Estás pensando en crear tu propia empresa? En ese caso, entre los imprescindibles de tu inversión está el gasto en material de oficina. Analizamos cómo tienes que focalizar tus compras para abarcar todo lo que necesitas sin que se te dispare el presupuesto. Estas pautas también te sirven para revisar lo que estás haciendo, si ya tienes una oficina montada y en funcionamiento. Te garantizamos que puedes tener todo y, además, ¡ahorrar!.
Gastos imprescindibles en material de oficina
El concepto material de oficina es muy amplio, de aquí deriva la primera dificultad para concretar cuál es el gasto que implica. Piensa que hablamos de mobiliario, de toda la dotación tecnológica, del clásico material de papelería y de otros detalles igual de importantes. Sin embargo, vamos a centrarnos en más en lo más básico.
Según estudios del sector, el mínimo para abrir un pequeño despacho u oficina ronda los 4.500 euros. Con este presupuesto debes adquirir estos artículos:
1. Material de oficina informático
Imposible pensar en una oficina actual sin material informático. Recuerda que en este apartado, tienes que incluir ordenadores, ratones y teclados, cables y conectores, altavoces y micrófonos, discos duros y USB o los cartuchos de tinta para impresoras.
2. Mobiliario básico
Aquí la clave es que apliques la norma de menos es más. Empieza con pocos muebles y ya irás aumentando en la medida de tus necesidades. Por supuesto, las mesas y sillas de oficina son imprescindibles. Para sentarte, siempre sillas ergonómicas, este es un punto no negociable.
3. La inversión en papelería
En este punto nos referimos a lo que se entiende normalmente por material de oficina: los artículos de papelería:
- El papel: siempre se debería optar por el papel reciclado, más que por ahorro por un tema de sostenibilidad.
- Artículos de archivo: carpetas y subcarpetas, distintos formatos de archivadores, clasificadores y portafirmas.
- Escritura: bolígrafos, rotuladores, lápices o portaminas.
- Otros: desde grapadoras hasta guillotinas o máquinas destructoras, pasando por etiquetas o correctores y pegamentos.
- Material para organizar y planificar: agendas, calculadoras, bloc de notas o tacos de papel, calendarios de mesa y sus correspondientes recambios. Y, aunque cada vez se usan menos por la digitalización, no está de más contar con tarjeteros y algún listín de teléfonos y direcciones.
4. Artículos que mejoran el día a día
Los trabajadores pasan muchas horas en la oficina, por lo que hay ciertos detalles que es interesante tener para hacer que se sientan más cómodos. Además, es posible que recibas a clientes y proveedores en tu oficina, por lo que te aconsejamos contar con:
- Dispensadores o pequeñas neveras para tener disponible agua y otras bebidas.
- Un rincón para preparar cafés e infusiones, lo que implica también contar con vasos, platos y cubiertos.
- Artículos higiénicos, sobre todo, papel y toallitas para el baño. También, pañuelos de papel, en paquete o para sobremesa.
Consejos generales para ahorrar
Finalmente, te dejamos unas recomendaciones para ahorrar ese gasto en material de oficina, sin perder productividad:
- Imprime solo lo imprescindible.
- Recicla papel por la cara en blanco para notas o documentos internos, borradores y similares.
- Grapa solo cuando esté claro que el documento está completo. Sujeta con clips o mete en carpetas mientras estés trabajando y no sea definitivo.
- No uses la opción de imprimir en color para pruebas o informes en los que no sea necesario., reducirás mucho el gasto en tinta de impresora.
- Aprovecha la ventaja del correo electrónico y otras vías digitales para comunicarte con clientes y proveedores, en lugar de cartas u otros sistemas convencionales.
- Programa las compras y elige empresas especializadas en material de oficina como Deskidea, donde hay mayores ofertas.
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